Más recomendaciones Lo importante, insiste Bill Rogers, es que si tenemos problemas comuniquemos a nuestros alumnos y alumnas nuestra creencia de que, como clase, "podemos ser mejores que esto". Esta creencia es percibida por la mayoría de los estudiantes de la clase y puede transformar una dinámica negativa. Algunas estrategias más que nos pueden ayudar en este sentido: Aprender y usar los nombres de los alumnos Este puede sonar mundano, pero es crucial desde el primer día. Implica un esfuerzo pero es significativo desde el punto de vista relacional, y es esencial para construir relaciones positivas. En primaria los nombres de los alumnos se pueden escribir en tarjetas colocadas en las mesas desde el primer día. Bill Rogers explica que, como mentor y tutor en cada nueva clase con la que ha trabajado, pide a algún alumno que le dibuje un plano de la clase con el nombre de cada uno. De esta forma puede usar este "mapa de nombres" desde el principio , espe